Nuevo estudio ofrece posible avance en tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer
Los científicos identificaron un neoantígeno de puntos calientes derivado de un oncogén conocido como RAS, el cual comparten un tercio de todos los cánceres humanos y el 20 por ciento de los casos de melanoma. (Louis Reed/Unsplash)
Para que un tratamiento de inmunoterapia sea efectivo para tratar el cáncer, el sistema inmune del paciente debe ser capaz de “detectar” el tumor en cuestión.
Los llamados “puntos calientes” (llamados así porque son la zona de mayor actividad) en la membrana exterior de las células cancerígenas podrían ser la clave para mejorar la inmunoterapia. Estas estructuras moleculares contienen péptidos mutados llamados neoantígenos, los cuales son detectadas por las células T del sistema inmune como organismos extraños, el primer paso para adherirse a los neoantígenos y, de esa manera, destruir las células cancerosas.
Lamentablemente, solo un puñado de neoantígenos califican como estos puntos calientes. Y son difíciles de encontrar porque son detectadas por el sistema inmune como complejos proteicos, los cuales vienen en miles de distintas versiones.

La profesora Yardena Samuels del Instituto Weizmann de Ciencias y su doctoranda Aviyah Peri dirigen a un equipo que usa bioinformáticos para desarrollar un método para identificar rasgos comunes en varios tumores. Esto puede ayudar a desarrollar tratamientos de inmunoterapia efectiva en un gran número de pacientes.
Sus descubrimientos fueron publicados en el Journal of Clinical Investigation.
Los científicos aplican algoritmos para buscar información en las bases de datos internacionales que contienen los genomas de miles de pacientes de cáncer. Al enfocarse en el melanoma, el principal tipo de cáncer estudiado en el laboratorio de Samuels, han buscado las variantes más comunes de las mutaciones presentes en los complejos proteicos más comunes. La búsqueda ha producido varios neoantígenos que podrían potencialmente ser considerados como puntos calientes.
Posteriormente, los científicos sometieron las moléculas de los candidatos a análisis de laboratorio e investigaron sus interacciones con las células T.
A través de este procedimiento, los científicos identificaron un neoantígeno derivado del oncogén RAS, el cual es compartido en un tercio de todos los cánceres humanos y el 20 por ciento de los casos de melanoma.
Ellas y sus colegas han logrado aislar el receptor de las células T que reconoce este neoantígeno de los puntos calientes en los tumores de melanoma. Después, modificaron células T de individuos saludables para que expresen este receptor y, posteriormente, las incubaron con muestras de tumores en pacientes que presentaban estos puntos calientes. Las células T únicamente eliminaron las células que mostraban el neoantígeno.
“Hemos descubierto un neoantígeno que es compartido en miles de nuevos casos de melanoma cada año y hemos mostrado que puede ser utilizado en estos pacientes para que las células cancerígenas sean marcadas para su eliminación inmunológica”, dijo Peri.
“Nuestro estudio sugiere que nuestra plataforma recientemente desarrollada puede conducir a inmunoterapias preparadas con anticipación en las que los receptores de las células T reconozcan los puntos críticos del cáncer y puedan ser aplicadas en grupos de pacientes cuyos tumores muestren estos puntos calientes”, dijo Samuels.
En el estudio también participaron el difunto profesor Nir Friedman del Departamento de Inmunología de Weizmann; la profesora Masha Y. Niv de la Universidad Hebrea de Jerusalén; el profesor Steven A. Rosenberg del Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos; el profesor Cyrille J. Cohen de la Universidad de Bar-Ilan; el Dr. Ansuman T. Satpathy de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford; y otros investigadores.
Producido en asociación con Israel21C.
Traducción de Mario Alberto Vázquez; editado por Mario Vázquez y Melanie Slone